Por Juan Marín
Norma Jeane o más conocida por su alter ego Marilyn Monroe, fue un importante ícono de la cultura pop durante los años 50. Una actriz con una filmografía amplia durante la edad de oro de Hollywood. Actuó en varios géneros distintos desde comedias y musicales hasta cine negro. Llegó a ser dirigida por directores de talla mundial como John Huston, Fritz Lang o Billy Wider.
También los medios la convirtieron en un símbolo sexual, transformándose en un emblema de la revolución sexual, en un momento donde el discurso misógino era hegemónico. Sin embargo, no todo fue glamour y fama, también su vida estuvo marcada por oscuros y tormentosos acontecimientos. La cinta “Blonde” intenta ser un ensayo psicológico sobre quien es la persona detrás de este personaje, no sobre la estrella que todos conocen. El filme retrata esos momentos de su vida, que estuvo constituida por más sombras que luces.
La nueva cinta de Andrew Dominik tiene el atrevimiento de convertir una “biopic” de una muy amada y respetada famosa en un drama psicológico crudo. Algo parecido a lo que hizo Pablo Larraín con Lady Di en “Spencer”. Hay que recalcar que mucho de lo que se muestra en la cinta es totalmente ficticio.
Está basada en la novela homónima de Joyce Carol Oates, una de las escritoras contemporáneas norteamericanas más interesantes. Lo que ella hace en el libro es inventar hechos en la vida de Marilyn, dramatizar sucesos que ocurrieron en verdad e imaginar que podría haber pasado con diversos momentos poco claros de su existencia. No es una biopic típica, se aleja mucho de ese género. Por supuesto la escritora investigó acuciosamente la vida de la actriz, pero su objetivo también era llevar a cabo una radiografía respecto de la manera en que la fama es capaz de destruir y hacer caer una súper estrella igual de rápido que como subió a la cima. Podría ser cualquiera, pero la elegida para representar ese canon fue Monroe. También la novela hace una fuerte crítica hacia una sociedad patriarcal donde reina la violencia machista. Los medios y Hollywood en gran parte son los culpables.
Era difícil imaginar que una biopic sobre Marilyn Monroe se convertiría en la película más polémica del año. El año pasado hubo cintas extremadamente controversiales, como por ejemplo la visceral “Titane”, la blasfema “Benedetta” y otras como la noruega “The Innocents” que es una terrorífica historia de niños con super poderes. Ninguna de las nombradas anteriormente causó todo el escándalo que logró “Blonde”. Se hicieron publicaciones en redes sociales con el afán de cancelar la cinta. con el argumento de que el filme era completamente misógino y manchaba la imagen de Marilyn, dejándola como una mujer atormentada mentalmente e ingenua.
Por cierto, que es válido el hecho de criticar una cinta porque no te gustó su contenido, Pero otra cosa es caer en el extremo de querer cancelar una producción para que nadie más lo vea, eso es digno de una dictadura. Lo mejor es invitar a ver la película y que cada uno saque sus propias conclusiones. El film tiene unos errores importantes, pero no creo que sea una cinta machista. Más bien es una crítica a cómo la sociedad patriarcal reduce a la mujer en un mero objeto, sexualizándola y humillándola todo el rato. Hollywood es un terrible productor de violencia sexual. La cinta denuncia estos actos repugnantes dentro de la industria.
Una de las razones por la que la cinta provoca tanto rechazo es que al relevar la violencia contra las mujeres es extremadamente dura y explícita. Se construye con una atmósfera de terror, provocando angustia y miedo. Más que un drama, es una cinta de terror psicológico. Hay escenas tenebrosas de un sadismo irracional.
Dominik en “Blonde” juega al límite. Arriesga demasiado. Es una propuesta valiente y osada que camina en puntilla sobre un hilo muy fino. Es un mix de varios estilos, a veces es abstracta, otras veces surrealista, otras experimental. También tiene un cambio del blanco y negro a color que es hermoso y de gran calidad artística. Aunque a veces la película se le va de las manos y termina siendo muy pretenciosa o banal. Por ejemplo, la decisión de poner la escena del feto parlante. Se entiende que es dentro del contexto de la época, con la moral de una mujer de los años 50 y lo que experimentaba en su cabeza por la experiencia traumática de haberse practicado un aborto. Pero no se distingue de una propaganda de las campañas en Estados Unidos de “siempre por la vida”. Donde en el país existe una polarización política por la terrible y retrograda decisión que tomó el congreso estadounidense sobre el aborto.
La que destaca es por sobre todo la actriz cubana-española Ana De Armas. Impresiona su soltura para camuflarse dentro de la piel del personaje. El personaje sufre mucho y luego se oculta en su alter ego Marilyn Monroe para escabullirse de los llantos y ser una estrella de cine amada. Algo parecido a un trastorno bipolar. Se puede apreciar en la gran escena en que le lanza un beso al espejo y luego se le trasmuta totalmente el rostro. Pasa de estar llorando a estar completamente feliz y sentirse sexy. Maravillosa ella como actriz, se jugó la vida en el set y este es el papel más importante de su carrera. Ahora pienso que, si veo una película de Marilyn Monroe, no sabría si estoy viendo a Ana De Armas o a la verdadera. Es que los rasgos y los actos son idénticos. Incluso hay fotografías icónicas de la vida de Monroe que en la película son reproducidas tal cual eran. Ya es hora que le den el Oscar a esta actriz.
“Blonde” es una de las apuestas de Netflix más arriesgadas del año. Obviamente no es perfecta, pero es cine en estado puro y se hizo con pasión, eso se agradece. Andrew Dominik experimenta para que funcione y vaya que si funciona. La fama te destruye y no hay escapatoria.