Uno de los roles claves de la saga literaria Fundación de Isaac Asimov ha sido nombrado por el presidente electo como su personaje favorito. Se trata de un diplomático e inteligente político más cercano al realismo pragmático que a la irreal fantasía de este clásico de la ciencia ficción del siglo pasado. Se trata de un personaje que debe encarar tiempos de cambio, un período bisagra entre lo viejo y lo nuevo, al igual que los propios desafíos que deberá encarar Gabriel Boric cuando asuma la presidencia de Chile.
Por: Ernesto Garratt (publicado originalmente en www.lared.cl)
El Presidente electo Gabriel Boric siempre ha manifestado sin reparos su pasión por la literatura. En sus redes sociales ha tenido una política de puertas abiertas con sus gustos y preocupaciones literarias. Por ejemplo, recientemente celebró en Twitter que la casa del poeta chileno Jorge Teillier fuera nombrada Monumento Nacional.
Asimismo, ha sido también en sus redes sociales una guía para quienes busquen tips de lectura. De hecho, ha recomendado una de sus sagas favoritas: Fundación, clásico de la ciencia ficción escrito por Isaac Asimov y que relata, en pocas líneas, cómo un régimen imperial está cayendo y llegando a su fin y se abre paso a una nueva etapa de transformaciones sociales.
Durante el período de campaña electoral, el diario El Mercurio hizo una encuesta a los candidatos a la presidencia consultando sobre un reducido espectro de su consumo cultural y a muchos les llamó la atención cuando Gabriel Boric escribió un nombre poco conocido por la mayoría en el bloque personaje de ficción con el que se identifica.
Mientras su mayor contendor hablaba de Capitán América, y otros candidatos mencionaban a Heidi, Batman o Sherlock Holmes, el candidato de Apruebo Dignidad optó por Salvor Hardin: un político clave de la saga Fundación, una historia como ya dijimos de ciencia ficción, ambientada en un futuro remoto y sobre cómo los hombres son capaces de asimilar y encarar los enormes cambios a la vista.
El Imperio que rige el orden de las cosas en esta trama teme a los pronósticos de un profeta del Apocalipsis: Hari Seldon, profesor que desarrolla la psicohistoria, rama que le permite anticipar mediante cálculos matemáticos los catastróficos eventos que el Emperador Cleón se niega a aceptar. Una de las soluciones de Seldon y sus seguidores es instalarse en un remoto planeta, Términus, para cuidar el legado de la humanidad en la naciente Fundación.
El año pasado Apple TV estrenó la serie Fundación donde el rol de Salvor Hardin era distinto al del libro: para empezar, en la serie de Apple TV se trata de un personaje femenino (interpretado por Leah Harvey), no masculino y su principal característica era resolver los problemas con la acción y la violencia en vez de la reflexión y el diálogo.
En este sentido, la definición de Salvor Hardin para estos efectos es la que proviene de las páginas de Fundación:
Trailer de la serie de Apple TV “Fundación”
Salvor Hardin es el primer alcalde de Términus, el planeta en donde se establece la Fundación, explica Luis Saavedra, escritor chileno de ciencia ficción y autor del elogiado libro Lentos animales interdimensionales (Cathartes Ediciones). El escritor chileno explica que el personaje con el cual se identifica el presidente electo de Chile, en vez de seguir la senda de la psicohistoria, elige la política como herramienta para enfrentarse a las condiciones del anillo exterior del Imperio, lleno de planetas atrasados y conservadores.
En una idea Salvor Hardin, explica además el gestor cultural Luis Saavedra, cree que la ciencia y el progreso es la alternativa a la ignorancia y las endebles condiciones de vida, pero también que no basta con esto, sino estableciendo el diálogo y la diplomacia y la estrategia política. Por eso es un político real. Como tal, debe atravesar diversas crisis para su comunidad, y lo hace a través de su fuerte fe en la misión de la fundación y habilidad política.
Pero ¿qué tantas parecen ser las similitudes entre un personaje de ficción y el político chileno? Luis Saavedra responde: Es un personaje que fácilmente se puede comparar con Boric. Ambos enfrentan un escenario adverso, un tiempo complejo y turbulento, que necesita de personas de fe en lo que creen, en la comunidad, en el valor del diálogo y la esperanza en los resultados que vendrán, que tal vez no vean. Ambos son jóvenes, se diferencian de su generación anterior, traen nuevas formas de ver las cosas. Ambos aprenden a manejarse en las aguas siempre revueltas de comunidades que no siempre están de acuerdo. Y lo más importante, creo que como lectores de la saga de Asimov y amigos de Boric, siempre deseamos que tengan éxito porque creemos en el futuro de la Fundación y de Chile, creemos que siempre habrá un desenlace en donde triunfe la luz.
Me encanta el personaje que escogió Boric. Creo que tiene muchos detractores hoy, pero se ha comportado bastante en consecuencia con quien eligió. No por nada -a pesar de todo- la tensión política bajó comparado a los álgidos años que vivimos despues del estallido. Hardin tiene mirada de largo plazo, no es un “cabeza caliente” ni un cortoplacista como muchos otros de la izquierda y derecha chilena. Sober la serie de APPLE TV… no pude pasar el primer capítulo, me parece muy ajena a la obra maestra de Asimov. Saludos