Por Javiera Catalán Soto
El universo cinematográfico de Guillermo Francella se expande una vez más, esta vez con la cinta dirigida por Ariel Winograd, El Robo del Siglo. Donde el actor de El secreto de sus ojos interpreta al uruguayo Mario Vitette, un ladrón profesional. Y está acompañado por Diego Peretti, Rafael Ferro, Pablo Rago y Mariano Argento, todos miembros de la banda responsable del robo al Banco Río, inspirado en el caso real que remeció a los argentinos el 2006.
Esta película sigue a Fernando Araujo (Peretti), el ideólogo del plan que el 13 de enero del 2006 logró que cinco hombres sacaran más de 15 millones de dólares de las cajas de seguridad de la bóveda de un banco, ubicado en el barrio de Acasusso, en Buenos Aires – uno de los más acaudalados de la ciudad -, tomando 23 rehenes con armas réplicas. Narra, en poco menos de dos horas que dura la cinta, cómo logró reclutar al resto del grupo, que ingresó a la sucursal de Perú con El Libertador, entre ellos, Mario Vitette, que operó como vocero del grupo ante la policía.
La preparación para llegar al gran día duró más de un año, y de eso consta la primera mitad de la cinta. De mostrarnos cómo se fue armando el plan, cómo se sumaron los integrantes de la banda y cómo se afinaron todos los detalles para logar que la salida del Banco Río fuera perfecta, y en caso de fallo, les cayeran menos años en la cárcel.
Es imposible no pensar en la trilogía de Steven Soderbergh La Gran Estafa, al ver El Robo del Siglo, porque sí, la preparación del plan, los flashbacks para ver cómo fue que resultó todo perfecto, son muy similares a la narrativa de Soderbergh, incluso tiene similitudes con la serie española La Casa de Papel. Pero la película de Winograd, que se estrenó hoy en Chile, tiene un gran plus, está basada en hechos reales. Esos hombres, por más que algunos detalles estén ficcionados y exagerados para aumentar el dramatismo de la historia, sí robaron más de 15 millones de dólares a plena luz del día, dejando ningún herido y escapando con el botín, a pesar de estar rodeados de policías.
La segunda mitad, o más bien, el tercer acto, muestra la vida después del gran robo y cómo los miembros de la banda se dedican a despilfarrar la plata que le robaron, con mucho orgullo, a los ricos. Y cómo pequeños errores los dejan al descubierto, y esto no es spoiler, porque el robo ocurrió realmente.
El Robo del Siglo es una película entretenida, tiene puntos altísimos de comedia, y también se permite ser emotiva, sobre todo cuando profundiza en las relaciones familiares de los ladrones. Los argentinos sacan a relucir lo mejor de su cine en esta cinta, que cuenta con un gran elenco, que muestra química en pantalla y logra transformar la historia de un asalto en una reivindicación social, bueno, eso en gran parte es responsabilidad de los guionistas, Alex Zito y Fernando Araujo, el mismísimo cabecilla de la banda atracadora, lo que le da doble credibilidad a la historia.
