El genio David Cronenberg acaba de estrenar “The Shrouds” en el Festival de Cannes, una de sus películas más personales. Está inspirada en su pena más grande, como ha confesado, la muerte de su esposa Carolyn Cronenberg en 2017 a los 66 años de edad. Este es el reporte de nuestro crítico amigo, el señor Juan Marín
La historia de la película es sobre un empresario que después de la muerte de su esposa, inventa un sistema que permite a los vivos vigilar a sus seres queridos difuntos. La protagonizan Diane Kruger y Vincent Cassel, incluso el actor francés tiene un aire a Cronenberg en el film.
Como suele pasar con las películas de Cronenberg, la crítica estuvo muy dividida. Para algunos es una película menor de Cronenberg y para otros resultó ser una obra maestra.
Por ejemplo Alejandro Calvo para Sensacine menciona que se trata de “un thriller sex-tech plagado de ideas potentísimas -la central: un estudio sobre el duelo (enfermedad y muerte) que incluye necrofilia por la vía de VERTIGO- que además posee un sentido del humor tremendo”.
Es un íntimo retrato de una dolorosa perdida y reflexión sobre el luto. Cronenberg en un estilo más emocional, pero jamás perdiendo su esencia. Lo nuevo del “king” del “body horror, una de las películas más esperadas por los cinéfilos en este festival de Cannes.
