“The Second Act”, la película inaugural del Festival de Cannes, fue recibida por una ovación en la Costa Azul. Por Juan Marín
Comienza el festival de cine más importante del mundo con una comedia francesa del siempre irreverente y absurdo Quentin Dupieux. “The Second Act” fue recibida con una ovación por parte de la audiencia apostada en el Palais des Festivals en la primera jornada del certamen.
La película se encuentra fuera de la competencia y es una sátira de humor negro sobre el mundo del cine actual con la incursión de la inteligencia artificial. Está protagonizada por Léa Seydoux, Vincent Lindon, Louis Garrel y Rapahël Quenard.
A pesar de sus ingeniosas ideas, la crítica señala que está lejos de los mejores trabajos de Dupieux. Peter Debruge para “Variety” señala que: “La estrategia de Dupieux parece consistir en darle la vuelta a las cosas o repetir ciertos chistes para conseguir un efecto fresco, lo que está bien durante un rato hasta que te das cuenta que ni la película ni esas segundas lecturas tienen mucho que decir”.
Dupieux repite con su burla al universo teatral, al igual que su anterior filme disponible en Mubi “Yannick”. Esta es la quinta película en tres años para este incomprendido cineasta francés. Acá no hay ruedas asesinas seriales, un sótano que controla las líneas temporales, “Power Rangers” cuyos poderes son los químicos del tabaco, ni moscas gigantes amaestradas por estúpidos, pero igualmente promete una dosis de lo absurdo.
